Durante la década de 1980, la dictadura cívico-militar chilena llevó a cabo reformas educativas neoliberales que modificaron profundamente las condiciones laborales de los docentes, especialmente por el traspaso de los establecimientos desde el Estado a los municipios. Durante el primer periodo de traspasos existieron algunas manifestaciones de activistas, pero solo en 1986 se ejecutaron resistencias masivas a esas políticas. Estas prácticas no representaron una oposición homogénea mediante la defensa de una política educativa alternativa a la oficial, sino más bien fue una oposición guiada por los tiempos políticos de la coyuntura, donde algunos sectores comenzaban a evaluar de forma positiva un sistema educativo municipalizado.
Basándonos en el análisis de diferentes antecedentes, en este trabajo buscamos analizar críticamente, desde una perspectiva histórica y política, las respuestas que presentaron las diversas organizaciones y fuerzas políticas del magisterio frente a la municipalización.