Depto. de Historia aumentará acreditación y presencia femenina en sus claustros

Por primera vez desde que se retomaran las elecciones democráticas, una académica vuelve a dirigir esta prestigiosa Unidad, que a nivel nacional destaca por la importancia de sus investigaciones. La Dra. Cristina Moyano Barahona, experta en Historia Política Contemporánea de Chile, apuesta en los próximos dos años a renovar los claustros, incentivando una mayor inserción femenina; aumentar los años de acreditación; y fortalecer las líneas de investigación y vinculación con estudiantes y egresados. Además, la nueva autoridad le dará prioridad a continuar los ajustes curriculares en las Licenciaturas y mejorar los procesos de gestión interna.

Elegida democráticamente por un claustro académico compuesto por 18 académicos en donde solo 4 son mujeres, la Dra. Cristina Moyano Barahona, experta en Historia Política Contemporánea de Chile y titulada por nuestro Plantel, asume por los próximos dos años la dirección del Departamento de Historia.

La académica, que forma parte de la Unidad desde el año 2008, considera en su trayectoria la dirección como Vicedecana de Investigación y Postgrados de la Facultad de Humanidades (2016-2017), y como jefa de carrera de la Licenciatura y la Pedagogía en Historia (2008-2015).

Además, ha dirigido 5 investigaciones Fondecyt y Conicyt; ha obtenido 5 patentes en proyectos de investigación en los últimos 10 años como investigadora responsable; ha publicado más de 13 artículos en Revistas ISI, SCOPUS y LATINDEX; ha escrito 3 libros y, ha contribuido con numerosos capítulos en prestigiosos libros y revistas con referato.

Su elección la asume “como un reconocimiento a la trayectoria” por parte de sus pares y “por la gestión que he tenido en el Departamento. También a mi personalidad; creo que vieron además un gesto de reconocimiento a la importancia que tenemos las mujeres en el mundo académico y en la gestión administrativa en la Universidad”, destaca.

Agradece, además, el apoyo recibido desde su inserción como estudiante de pregrado y en su desarrollo como académica.

“En el Departamento siempre he sentido apoyo, una camaradería, una camiseta bien puesta. Con mucho trabajo, he podido desarrollar sin inconvenientes las iniciativas y propuestas vinculadas a mi desarrollo académico”, puntualiza.

Aspiraciones y Desafíos

Durante los próximos dos años liderando a la Unidad, la académica proyecta importantes desafíos, “manteniendo el sello de identidad y calidad que ha caracterizado al Departamento tras su reapertura en 1985´”, enfatiza, asegurando que desde hace un tiempo comenzó un proceso de renovación.

Uno de los desafíos es renovar los claustros fomentando la inserción académica femenina.
“Tenemos una buena constitución de claustro, pero se proyecta en cinco años el retiro de profesores por jubilación que requerirá ajustes importantes, y debemos renovar manteniendo los estándares de calidad que exige la Universidad y la CNA”, sostiene.

Considerando que solo 4 de 18 académicos son mujeres, la directora enfatiza que “es un desafío hacer más paritario este departamento. Nosotros hemos participado con las demandas estudiantiles y movimientos feministas respecto a que esto es un requerimiento y una necesidad política importante”.

Otro desafío es aumentar los años de acreditación de la oferta curricular, que actualmente tiene 5 años en el Doctorado; 8 años para el Magíster; 5 años para la Pedagogía y Licenciatura en Historia; y se encuentra en proceso de acreditación, en el caso de Licenciatura en Estudios Internacionales.

Para ello, la directora buscará continuar la regularización de los programas de estudios de las Licenciaturas reduciéndolos de 5 a 4 años, según la normativa Institucional; y, fortalecer, en el caso de la Pedagogía, su relación con el Departamento de Educación.

Investigación y Gestión

Uno de los ejes centrales que destacan en el Departamento de Historia es la investigación disciplinaria que realizan sus académicos y estudiantes. En ese contexto, fomentar el desarrollo de líneas de investigación para aumentar la vinculación con estudiantes y egresados es otro de los desafíos importantes.

“La línea de investigación-acción, de historia social y local que hemos desarrollado, es un área que queremos mantener y fortalecer en el tiempo, ya que es una buena dinámica de inserción de los estudiantes en prácticas de investigación que no son las tradicionales en la historiografía”, comenta.

Otra de las líneas a robustecer es el área de gestión cultural, para lo cual la directora proyecta establecer un observatorio de Políticas Culturales en Chile, desde nuestra Casa de Estudios, que permita evaluar la gestión cultural que se hace en nuestro país.

Finaliza sus proyecciones comentando que buscará continuar el trabajo en el ámbito del mejoramiento de los procesos de gestión interna del Departamento, para “la obtención oportuna de datos y la vinculación efectiva con egresados, que es uno de los puntos en deuda”, concluye.